"Sigo en la junta para continuar vigilando hasta el último día"

Article al Mundo Deportivo

El vicepresidente de patrimonio del FC Barcelona, Jaume Ferrer, ha reconocido hoy que uno de los motivos que le impulsan a permanecer en la junta directiva y no presentar la dimisión es seguir "vigilando hasta el último día". Ferrer se ha erigido desde hace unas semanas en precandidato a la presidencia del Barça, y en una entrevista a EFE se ha mostrado decepcionado porque la semana pasada el presidente Joan Laporta le apartó de la comisión delegada, el órgano ejecutivo del club, porque entendía el mandatario que la nueva ocupación del directivo le restaría tiempo para dedicarse a las funciones del club. En esta misma tesitura se encuentran el también vicepresidente y precandidato a la presidencia Alfons Godall y un tercer vicepresidente, Albert Perrín, todos ellos rebajados exclusivamente a las funciones de la junta directiva, la cual se reunirá mañana en sesión ordinaria, y en la que se espera que Ferrer y Perrín, ambos en el mismo equipo de precandidatura, expresen su disconformidad.

"Si no hubiese en la comisión delegada ningún miembro de las precandidaturas podríamos entender al presidente. Pero en el momento que queda uno (el tesorero Xavier Sala i Martín) es cuando no se entiende el por qué. Las razones que se dan no son las que son y creemos que se debería hacer justicia: o volvemos a la delegada todos o que se marchen los que van en una candidatura", señaló.

A este respecto, hace unos días Sala replicó a su compañero de junta cuando dijo que Ferrer conocía perfectamente los estatutos y que por ello no daba crédito a que hubiese puesto en duda que el tesorero debía estar en la comisión delegada, tras lo cual dijo que esas palabras sólo las podía haber expresado un "impostor". La contrarréplica la puso Ferrer al señalar: "Todos conocemos a Xavier Sala, tanto aquí como en América, y sabemos que tiene una incontinencia verbal que hace que muchas veces sea poco creíble". "Solicitaremos mañana que haya la neutralidad que prometió el presidente. A ver cómo va la junta. Estamos preocupados con continuar gobernando el club, y hacerlo bien. Hay decisiones importantes que se deben adoptar en los próximos cuatro meses. Ahora estaremos más vigilantes. Ahora no votaremos que sí por confianza, querremos saber el 100% de las cosas que se hacen y cómo", señaló.

Ferrer ha aseguro que no se ha planteado en ningún momento la dimisión, porque nunca ha perdido "el empuje y la ilusión" para continuar gobernando el club. "Quizá todas estas actuaciones que han pasado iban dirigidas para que dimitiese, para que perdiese las ganas y el empuje. Al revés, aún me han dado mucha más fuerza. Quiero estar aquí vigilando hasta el último día las decisiones que se adopten", razonó. En todas estas maniobras que observa en el club y que cree que algunas juegan en su contra, Ferrer censuró la posición del presidente, especialmente cuando éste ha dado un paso al frente para posicionarse al lado de la opción de Godall como futuro candidato. "Laporta no está manteniendo la neutralidad que dijo que tendría, por la razón que sea. Su apoyo a Godall lo ha hecho patente. Eso se ve. La ayuda de Laporta a Godall suma más que resta. Godall cuenta con ventaja", observó, después de poner en duda que el presidente barcelonista se la tenga jurada por la cierta ambigüedad que mostró Ferrer después de la moción de censura del 2008, cuando sopesó dar su apoyo a que continuase Laporta.

"Espero que no sea por esto. En aquella ocasión analicé la situación y mi análisis final fue que si el presidente tenía fuerza, ganas e ilusión para continuar gobernando el club se lo había ganado en la votación. No creo que eso le molestase. Al revés", aseguró. Ferrer regresó a la cuestión del abandono de la comisión delegada y señaló que se trata de una "pérdida de confianza" en las personas, y ello le obligará a ser más incisivo en las reuniones de junta para "saber cómo se han hecho las cosas y lo que se pretende aprobar". Otro punto de desconfianza que subrayó Ferrer tiene que ver con la utilización del aparato del club en las próximas elecciones. En ningún momento Ferrer puso en duda que éste vaya a ser utilizado en beneficio de Godall pero, debido a las expulsiones de la comisión delegada, el vicepresidente de patrimonio considera que se deben incrementar las medidas de control. "Esta es una de las cosas por las cuales nos queremos quedar, para que el aparato del club tenga la máxima neutralidad ante todo los candidatos. El mandato está vivo y hasta el 30 de junio hay cosas que decidir", recordó.

Acerca de las alianzas que se pueden producir en las próximas semanas, y más cuando se espera que el ex vicepresidente de economía Ferran Soriano aparezca en escena, Ferrer considera imposible volver a apostar por una candidatura única desde dentro de la junta. De hecho, Ferrer no tuvo ningún reparo en subrayar dónde quedó atrapado el acuerdo que se esperaba entre directivos para impulsar un equipo único: "Yo no tengo ningún problemas con nadie de la junta. Quizá lo tiene Godall. No nos hemos podido poner de acuerdo porque ha habido algunas personas que han sido vetadas. Godall no quiere que vayan Perrín, Colomer ni Jacint Borràs en una junta unitaria" "Esto no se discute porque hemos estado hasta el última momento con el grupo. Lo importante es el modelo. De entrada, yo cuento con todos los miembros del equipo de Godall. Ya lo dije en una junta directiva. Ahora ya es una utopía que vayamos juntos", concluyó.